MARTINEZ CINTURA
Arrastrándose entre las calles,
pasa, o se detiene un hombre o lo que
parece de él, 45 centímetros si acaso, sin piernas, despertando la misericordia
o la repulsión de todos…Mirando la situación de aquel, terminamos de pronto dando gracias a la vida
por no padecer minusvalías notables. Se moviliza en una tabla que rueda sobre
balineras, impulsada por sus manos gruesas, recias y callosas, las cuales cubre
a veces con guantes descoloridos y rotos…
El hombre extiende la mano, pero
lo hace en silencio y sin gritos lastimeros…
algunos se detienen y le dan unas monedas, otros le traen algo de comer
o beber, otros le miran con ojos de lástima y pasan simplemente, otros huyen
como evitando el mal o la enfermedad como si fuera contagiosa, o porque están
vaciados como él mismo y no tienen nada
para ofrecer…
La mayoría le dicen Martínez porque su nombre les parece difícil o
impronunciable: Centrein. Otros le dicen Martínez cultura, porque escribe
versos y explica sobre el contenido de los libros, habla de programación
mental, del optimismo; y cuando recibe
ayuda de alguien, dice en tono como de canción de Facundo Cabral: Que la vida
lo recompense hermano(a)…Otros le dicen cintura, porque se ciñe con un cinturón
grueso de cuero.
Cuando tenía sus extremidades, cuenta que tenía una estatura de 1.55. Su
piel es clara, de cabellos rubios, aparenta 35 años, tiene ojos claros y
románticos…Mirándolo en conjunto en su físico, tiene el aspecto de un niño de
seis a ocho años, pero su voz es varonil y sonora, y cuando algo necesita
puntualizarse o entenderse por sus amigos o las gentes del sector, acuden a sus
sabios consejos. Dicen quienes lo conocen, que
a veces cuenta chistes de la vida
sin utilizar palabras obscenas, y que tiene un alto sentido de conocimiento de personajes
de la literatura y de la filosofía…Que explica las categorías de Aristóteles,
la muerte de Sócrates, la retractación de Galileo, algunos cuentos de Borges, el sentido de Macondo en García Márquez; y que canta a palo seco las canciones de
Facundo, Feliciano y Arjona. Dice que se
encuentra en esas condiciones desde el terremoto del Eje Cafetero, en el cual lo perdió todo, su
familia, su negocio y sus piernas…
Refriega sus manos callosas en el cemento tratando de impulsar la
tablilla equipada con pequeñas ruedas
que impulsan su mutilada figura. Cuando pasan los minutos, y en el sitio en
que se encuentra no pasa nada, busca otro lugar donde poderse encontrar con la
limosna, o con alguien para conversar.
Los signos de la calle son conocidos por las gentes de los distintos
sectores… Cuando los autos dejan de pasar, o la gente se pierde por momentos de
la calle: Se debe entender que algo
sucede, que taparon la vía por daños, reparaciones, o accidentes; o que
hay una situación de seguridad, por lo
cual es mejor cambiar de lugar. Cintura escribe sobre el desfile de autos, de
personajes, de mujeres elegantes de jóvenes hermosas, sobre la vida que palpita
en las bellas jovencitas, sobre la vida que se escapa de los viejos,
sobre la vida de algunos truhanes
y delincuentes que son el acoso del sector…Imprime hojas con poemas por los
cuales recibe colaboración…
Algunos dicen que su intención es publicar un libro… Cuentan sus amigos
que en sus ratos libres, y huyendo a veces del tedio rutinario de las calles,
del exceso de ruido de los autos, los
pitos, gritos y afanes propios de la calle, la música estridente, los megáfonos y altavoces haciendo marco al nervio despavorido de las
sirenas…se refugian con Cintura en un
portal, para escuchar sus prédicas sobre la vida.
Su condición de minusválido, no
le ha hecho perder el optimismo, el cual él dice recuperó, dos años después del accidente, cuando habló con
un hombre de cabello largo que encontró en un parque en Cali. Cintura, al igual
que otros habitantes de la calle, tiene su cara quemada por el sol. En sí es una persona que irradia
confianza y tranquilidad, y escuchándolo hablar, muchas veces se pierde el deseo de compadecer a aquel que
lo ha perdido todo. Muchos no saben si éste esconde muy bien su dolor, o en
últimas ya lo ha superado…Cintura muestra a un hombre, que para su voluntad o en contra de ella, ha pasado
y padecido las duras contradicciones de la vida, pero al tiempo, ha aprendido a sobrellevar sus consecuencias
de manera tranquila esperando “la buena”, como dice, la solución de sus
problemas…
Viste siempre trajes grises y negros. Dice que vive solo y que no
tiene a nadie más que sus manos. Ha aprendido a sobrellevar las miradas
cargadas de lástima o desprecio del Otro, del sano del que se cree invulnerable
e inmortal…
Recuerda alguna vez en sus charlas, que él también fue grande, fuerte, deportista, y admirado…
pero ahora carga o pasa las
consecuencias de alguna prueba o Karma. Recuerda que tras el terremoto lo
perdió todo. De su familia guarda un doloroso recuerdo; pero de las pérdidas materiales, dice que algún
día las recuperará…
Cuenta que sus piernas se
perdieron por la presión que hizo una de las vigas que se desprendió techo,
aprisionando sus extremidades. Algunos dicen, que han sorprendido a Cintura hablado solo, adormecido soñando, diciendo: Volveré a
caminar…Y que se habla a sí mismo, de las cosas que hará cuando vuelva a
caminar…En sus sueños se mira dejando a un lado su tablilla… Siendo llevado a
un Centro Ortopédico donde le solucionarán sus problemas, porque
sólo necesita un par de piernas para abandonar las calles, y con una ayuda, volver a su oficio de librero o
a otra actividad fuera de las calles.
Se recuesta de espaldas a la pared, como vencido por el sueño… abre los
ojos y mira que dos hombres vestidos de
negro que se dirigen a él, y le dicen que su patrón lo ha mandado a buscar para
llevarlo a un Centro Ortopédico donde le probarán y adaptarán las prótesis de
sus piernas…Este sueño se ha vuelto
reiterativo en los últimos días…En el sueño se mira con sus piernas, caminando
nuevamente…los hombres vestidos de negro y gris, le dicen: -Que si no hay
ninguna oposición de su parte, lo llevarán hasta donde espera una camioneta....
Él responde: -Háganlo, háganlo…
Un día, cerca de las dos de la tarde, la mujer que vendía pan en la
esquina alerta a los otros vendedores de la calle que reposaban el descanso de
la descongestión, sobre: Que unos hombres vestidos de negro y de gris se
estaban llevando a Cintura, y que lo
metían con tabla y todo, en una
camioneta de color negro, cuatro puertas…Unos decían, que era la policía cargando a los mendigos para controlar la ociosidad… El
del puesto de revistas pensaba que de pronto los hombres de negro que se llevaban a Cintura, para saldar alguna cuenta de denuncia o de
zapeó. El que vendía lotería no lo pensó dos veces, y alertó a los motorizados de la policía que
pasaban en ese momento por el lugar,
diciéndoles que estaban secuestrando Cintura por la plata que decían que guardaba en un
cajón en la parte baja de la tablilla…
Todo sucedió en unos segundos, los policías bajaron de la moto, y se
acercan a ver lo sucedido, luego enfilan sus motos abriendo paso entre las
calles, pero al rato las motos volaban por el aire despedazadas… él sabe que lo
llevan al centro de rehabilitación…Cintura
por coincidencia, ese día, también vestía de negro y de gris…
Luego un grito: Cintura despierte tome un poco de refresco para que deje
de soñar. Enseguida mira, que unos hombres grandes vestidos de negro, en igualdad
de situaciones como en el sueño, que le proponen llevarlo a un Centro Ortopédico…Cintura
les contesta que no tiene impedimentos para aceptar la oferta, y les agradece el
gesto… los hombres cargan con él hasta
una camioneta cuatro puertas.
En un Centro Ortopédico ubicado al
norte de la ciudad espera don Matías la llegada de sus hombres de confianza con
el lisiado. La camioneta arriba al lugar.
Y Cintura se encuentra con la
figura dominante de su protector quién con grave acento solicita al grupo de
especialistas la revisión del paciente para la adaptación de las prótesis…
El fin parecía como un cuento de Hadas, Cintura consiguió trabajo en una biblioteca
importante de la ciudad capital…Pero, justo la misma noche de la celebración su
cumpleaños en el Club el Nogal, se dio
una explosión que mató a muchas personas, incluido Cintura…
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